La aplicación de pruebas proyectivas es una técnica utilizada en el ámbito de la psicología para evaluar aspectos de la personalidad, los pensamientos y las emociones de un individuo. Estas pruebas, como el Test de la Figura Humana o el Test de Apercepción Temática (TAT), presentan estímulos ambiguos o imágenes abiertas que permiten al sujeto proyectar sus propios significados y experiencias en ellos.
El psicólogo analiza las respuestas del individuo en función de patrones, símbolos y temas recurrentes, lo que puede proporcionar información sobre su mundo interno, su autoimagen, sus conflictos emocionales y sus procesos cognitivos. Las pruebas proyectivas son complementarias a otras evaluaciones psicológicas y pueden ayudar en la comprensión y el diagnóstico de un individuo.